Cómo Steril-Aire UVC puede reducir costos de energía y operacionales

Resumen Ejecutivo

¿Y si hubiese una inversión que paga beneficios medibles y casi inmediatos tanto al reducir los costos de energía como los de mantenimiento? ¿Y si pudiese restaurar su sistema de calefacción, aire acondicionado y ventilación o sistema de climatización (HVAC) a nuevo y mantenerlo limpio sin químicos nocivos o lavado a presión? Imagínese lo que sus ingenieros podrían hacer con el tiempo perdido entre la investigación, gestión y resolución de los problemas debido a quejas de comodidad térmica. ¿Y si la recuperación de la inversión para lograr todo esto fuese menor a 2 años?

Este informe provee una visión general del desafío que es mantener los sistemas de climatización (HVAC) funcionando de manera eficiente, con un rendimiento óptimo que a su vez permite reducir los costes energéticos y operativos. Les presentamos el poder y la ciencia de la luz Ultravioleta C (UVC) su eficacia germicida en cuanto a la limpieza de los serpentines de enfriamiento y las bandejas de drenaje además de la posibilidad de mejorar la transferencia de calor del serpentín de enfriamiento y optimizar el rendimiento de la enfriadora.

Este documento explora cómo Steril-Aire UVC ha contribuido a que organizaciones como la suya cumpla con mejorar las siguientes metas operacionales: mejorar la comodidad de los ocupantes, reducir los costos de energía que son sostenibles mientras mejora la utilización de los recursos escasos de las instalaciones. Copyright © 2013 Steril-Aire, Inc.

Introducción

La contaminación biológica de las aletas interiores y de los tubos intercambiadores de calor, sobre todo de los evaporadores de aire acondicionado, es un factor clave para la disminución de la capacidad y de la eficiencia así como el incremento en el uso general de energía y la demanda máxima de electricidad. Esta contaminación biológica actúa como un aislante y reduce la transferencia de calor en el sistema de climatización HVAC. Para mantener el edificio a la temperatura deseada, los ventiladores tienen que trabajar más. La temperatura del agua enfriada debe ser bajada, haciendo que el enfriador y el compresor trabajen más, lo cual resulta en un aumento de los costos de energía.

El aire acondicionado es el mayor consumidor de energía en edificios comerciales e institucionales, siendo la planta enfriadora el mayor consumidor de energía dentro del sistema de aire acondicionado. De hecho, los sistemas de climatización HVAC representan aproximadamente el 40-60% del consumo de energía en los edificios. Teniendo en cuenta que la contaminación de los serpentines puede añadir otros 30% (Programa de Gestión de Federal de Energía) a los costos de construcción mientras que produce 10% menos de enfriamiento (J. Siegel, et al, 2002), el rendimiento y la eficiencia energética se convierten en factores claves en cuanto al resultado final.

La Ciencia de la Luz Ultravioleta

La luz ultravioleta (UV) es una forma de energía electromagnética producida naturalmente por el sol. La luz UV es un espectro de luz justo por debajo de la luz visible y que se divide en cuatro zonas diferenciadas del espectro -Vacío UV (100 a 200 nm), UVC (200-280 nm), UVB (280-315 nm) y UVA (315 a 400 nm).

El espectro UV completo puede matar o inactivar muchas especies de microorganismos, evitando que se reproduzca. La energía UVC a 253,7 nanómetros provee el mayor efecto germicida. La aplicación de energía UVC para inactivar los microorganismos también se conoce como irradiación germicida o IGUV.

Aplicación de Emisores UVC en el sistema de climatización (HVAC)

Para un control microbiano más eficaz, la luz Ultravioleta C debe instalarse en el lado de la alimentación del sistema, aguas abajo del serpentín de refrigeración y por encima de la bandeja de drenaje. Esta ubicación proporciona control microbiano de Biofilm más eficaz que instalado en ductos ya que de esta manera la luz Ultravioleta C irradia los contaminantes en su origen y proporciona la limpieza simultánea de la superficie de las aletas del serpentín y mata a los microorganismos aerotransportados que pasan por el mismo.